Siempre he pensado que libros como el Gran
Gatsby tienen algo de solemnes, de real y fascinantes y que por ello quizá es
de ese tipo de libros que recomiendan leer al menos una vez en la vida.
En 1924, cuando Francis Scott Fitzgerald
terminó de escribir El Gran Gatsby anunció a su editor “he escrito la mejor
novela de los Estados Unidos” y no fue para poco. El libro fue catalogado como
un retrato certero del contexto americano en la década de “los felices años 20”.
En 1922, Estados Unidos se impuso como la nueva
potencia de la economía mundial y “el estilo de vida americano” se proyectó al
resto del mundo en forma de opulencia, riqueza y libertad. El sueño americano
halló espacio en los rincones más alejados, con promesas de compensar la iniciativa
y el trabajo duro con prosperidad y éxito. América era la tierra de las
oportunidades, de la libertad y donde todo era posible.
Carrey Mulligan y Leonardo DiCaprio en los papeles de Daisy Buchanan y Jay Gatsby. |
Esto me trae a la mente el filme de 'An american
tail', donde Fievel, un pequeño ratón ruso se encuentra viajando en un barco,
junto a su familia y otros inmigrantes, rumbo a Estados Unidos y durante el
trayecto todos cantan diciendo “En America no hay gatos y las calles de queso
son”. Cuanta sorpresa se llevarían esos ratoncitos al ver que no todo lo que
brilla es oro.
El genio de Fitzgerald no pudo menos que crear
a Jay Gatsby, el hombre que es la encarnación del sueño americano. Un joven
desconocido que logra comprar una masión y dar fiestas excentricas llenas de
celebridades y personas de apellidos distinguidos que especulan acerca del
anfitrión y el origen de su fortuna y su pasado.
¿Quién es ese Gatsby? ¿De dónde salió? Muchos
rumoran que mató a un hombre, dicen que estuvo en Oxford, que su familia murió heredándole
una gran fortuna, que es un traficante de licores, un héroe de la Primera
Guerra. Pero solo son rumores.
Los años 20 en Estados Unidos se caracterizaron
por el lujo y los excesos, la prohibición, los gánsters y las mafias, la era
del jazz, la publicidad tomando fuerza y los grandes capitales acrecentando el
poder económico, con la corrupción arrastrándose por debajo.
Bajo este panorama se teje toda la historia de
Gatsby, narrada por Nick Carraway, un joven de apellido dispuesto a ganarse la
vida vendiendo bonos, como todos lo hacían en la época. Nick es un hombre
honesto, discreto y poco dado a juzgar a los demás.
Carraway conoce a Gatsby y su historia, y sin
buscarlo, se involucra en ella. El millonario Jay Gatsby lleva cinco años enamorado
de Daisy Buchanan, una joven rica casada con Tom Buchanan, un hombre poco
inteligente, mujeriego y racista. Durante su juventud, Daisy y Jay, vivieron un
romance, pero él no pudo pedir su mano debido a que era pobre.
En el año 2013, la productora Warner Bros,
estrenó la película de este clásico de la literatura con Leonardo DiCaprio en
el papel protagónico y Carey Mulligan como Daisy Buchanan.
Si aún no leíste este magnifico libro o viste
la película, estas a tiempo de hacerlo y empaparte en la vida de los
locos años 20.
Sobre Scott Fitzgerald
Francis Scott Fitzgerald |
Francis Scott Key Fitzgerald (1896-1940) es
considerado un escritor de la generación pérdida al igual que Ernest Hemingway. Autor
de cuatro novelas y varios relatos cortos. The Great Gatsby es su mayor obra,
aunque durante la época tuvo una tibia acogida. Otra de sus obras que tuvo una
adaptación cinematográfica fue El curioso caso de Benjamín Button.
Fitzgerald no vivió una vida muy próspera,
estuvo cargado deudas y sumiéndose en el alcoholismo. Murió pobre y en soledad.