Con el taller de lectura “Las formas de Drácula, lecturas y relecturas de la novela de Stoker”, en puertas, el comunicador social, periodista y lector insaciable, Jorge Pablo Mustaffá Quirós, habló de las motivaciones y expectativas que tiene sobre el mismo.
“Sea bienvenido a mi morada- repitió- Entre por su propia voluntad, entre sin temor y deje aquí parte de la felicidad que lleva consigo”, esta es, quizás, una de las frases más célebres del libro de influenció a gran parte de la literatura contemporánea, Drácula, escrita por el irlandés, Bram Stoker, y publicada en el año de 1897.
Jorge Mustaffá, quien brindará el taller, llevará a los participantes a explorar los recodos de una novela que ha despertado su fascinación, tanto por las temáticas que aborda como por el personaje principal, que es, probablemente, más famoso que el libro mismo.
El taller “Las formas de Drácula, lecturas y relecturas de la novela de Stoker” arranca este jueves 20 de octubre y concluirá el 24 de noviembre. Las sesiones serán desarrolladas el jueves de cada semana, a las 19:30. La inversión es de Bs.50.
Los encuentros serán presenciales, en las instalaciones del centro cultural-artístico Casa CreArt, ubicado en la avenida Domingo Paz, esquina Campero #517.
Si aún no te has inscrito, este es el momento para hacerlo. Compartimos una entrevista con el joven comunicador, donde nos comenta más detalles, a la vez que, asegura que no se necesita ser un conocedor de la literatura o, incluso, haber leído el libro previo al taller, para ser parte de este espacio de lectura.
Julieta Llave: Me gustaría comenzar pidiéndote que me platiques cómo surgió la idea de realizar un taller de lectura; y ¿por qué abordar ‘Drácula’ de Bram Stoker?
Jorge Mustaffá: Con el estudio de Drácula descubrí que la obra contenía múltiples capas de simbologías y metáforas que, bajo la figura del vampiro, trataban temas como la sexualidad y los roles femeninos; enfermedades como la tuberculosis, la rabia o la sífilis; o incluso temas relacionados a las clases sociales y la colonización. Todo me interesó muchísimo y, naturalmente, no paraba de hablar sobre ello con mis amigos, compañeros y algunos docentes. Pero notaba que no a todos les interesaba, como es normal. Así que busqué otras maneras de compartir todo lo que iba aprendiendo.
Primero lo hice con videos cortos en Instagram, Facebook y TikTok, vinculando a Drácula con la serie Stranger Things. Como tuvieron buena aceptación y empecé a recibir mensajes de gente interesada, decidí buscar maneras más completas de trasmitir todo lo que implica Drácula. Luego de descartar ideas como pódcasts o videos largos, supe que lo mejor era crear un taller de lectura, ya que a estos se inscribirían solo quienes estén realmente interesados. La idea de un taller de lectura es una influencia directa de los talleres que tomé con la poeta boliviana Viviana Gonzales, pero desde luego, repensados en la presencialidad e incluyendo películas, cómics, series y animación.
JLl: ¿Cuáles serán los temas que se tratarán durante las seis sesiones? ¿Qué detalles puedes adelantarnos?
Jorge Mustaffá: Son cuatro los principales temas que se abordarán a lo largo de las seis sesiones y son: el valor polisémico de la sangre; la sexualidad y los roles femeninos a finales del siglo XIX; Vlad Tepes, el Drácula histórico; y las nuevas narrativas mediáticas contemporáneas y transmediales creadas bajo la influencia de Drácula.
Puede que todo suene muy técnico o pesado para el que no está familiarizado con los términos, pero la dinámica está pensada para fluir a través de charlas ligeras en las que la opinión de cada participante es esencial. Pues el taller no es para expertos en literatura, el único perfil es aquel o aquella que disfruta de la lectura. Para cada sesión se leerá una parte del libro acompañada de lecturas de apoyo y películas opcionales.
JLl: ¿Cómo fue tu primer contacto con este personaje mítico en la obra de Stoker?
Jorge Mustaffá: La verdad es que Drácula no era una obra en mi lista de lecturas o intereses. Pero fue mi novia quien me la regaló en una ocasión especial. Entonces sí me interesé, porque, como muchos, sabía quién era el protagonista, mas no había tenido la oportunidad de acercarme a la obra original. Una vez leída, quedó como uno de mis libros favoritos.
Pero fue cuando entrevistaba a la escritora ecuatoriana Gabriela Alemán que me contó sobre los múltiples significados de la sangre en la novela, así como un poco del contexto histórico en que fue escrita. Ya que ella es alguien cuya obra admiro, estaba decidido a indagar más en ese misterio de Drácula que me contaba.
El resto se dio como una bola de nieve. Fui encontrando artículos, ensayos, tesis, videos, y acumulé tanto material como para sistematizarlo en forma de videos propios o en un taller para gente que comparta mi interés.
JLl: En cuanto a los participantes, ¿cuáles son las expectativas?, ¿qué consecuencias se buscan al concluir el taller?
Jorge Mustaffá: Es un taller pensado para pocos participantes. Espero un máximo de cinco o seis inscritos. De ser más, no siempre todos tienen la oportunidad o se animan a participar y hablar frente a todos. De modo que entre pocos se crea un círculo de confianza en el que no importa si uno sabe más que el otro: todos pueden participar desde su perspectiva.
Las repercusiones que espero, y que serían las ideales en mi mente, son crear esa sed de lectura que no se conforma con la historia de un libro, cuento o película, sino que busca todo lo que está escondido entre las letras. En el caso de Drácula se trata de encontrar qué representa el vampiro, ¿se trata de disidentes de la sociedad? ¿de enfermos o locos? ¿o, por el contrario, de una aristocracia que busca perpetuarse en la “cima” de la sociedad?
JLl: Eres un asiduo lector y has entrevistado a reconocidos autores, dime ¿cómo la literatura se entremezcla con el periodismo en tu vida?
Jorge Mustaffá: Mi lado periodístico es una repercusión de mi afición a las letras y a la literatura. Como tantos otros encontré en el periodismo la oportunidad de escribir todos los días y buscar historias de interés. Esa chance de experimentar con el lenguaje a diario, de pasar lo oral a lo escrito, es el vínculo entre mi vida de lector y mi vida de periodista.
Por otro lado, está la posibilidad de acercarme a los escritores que admiro y a las editoriales que los publican. Algunos de los que entrevisté o escribí son Gabriela Alemán, Viviana Gonzales, Mauricio Murillo, Fernando Barrientos (Editorial el Cuervo) y Gisela Derpic. Así, además de hacer todas mis preguntas, puedo animar a los públicos a conocer a estos autores y acercarse a sus obras. Además de recordarles que hoy sí hay gente que escribe en Bolivia y Latinoamérica. Lo hacen increíblemente bien y son reconocidos en el mundo, pero por algún motivo aquí no. Mi labor periodística puede ayudar a cambiar esa realidad.
JLl: Para concluir esta entrevista, cuéntanos ¿cuáles son tus planes posteriores a este primer taller de lectura? ¿vendrán otros?
Jorge Mustaffá: Hay dos planes para el futuro. El primero es seguir con la misma temática, pero de forma virtual y expandirla. Todo lo que es vampiros, bajo la influencia, obviamente, de Drácula, engloba un mundo que requeriría años de estudio. Por ejemplo, hay libros que se han escrito antes. No es el primero, pero sí, el que sienta las reglas. Lo interesante es que Drácula no se vuelve tan popular como obra literaria si no como obra teatral y luego como obra cinematográfica. Tiene alrededor de 200 adaptaciones al cine.
La otra opción es buscar otra novela, por ejemplo, Frankenstein, que es también del género gótico o El fantasma de la ópera.
En los últimos dos años, he estado leyendo dos cosas, lo gótico como Drácula y a autores bolivianos y latinoamericanos contemporáneos, que presentan un gótico diferente. El tema de lo gótico, como yo lo interpreto, tiene que ver más con lo monstruoso de la humanidad que con un vampiro o un fantasma. El hablar de monstros es como una excusa para hablar de la monstruosidad del ser humano. Tenemos autoras bolivianas y latinoamericanas que hablan de cosas monstruosas, que no tienen la necesidad de invocar a vampiros u hombres lobos; ellas encuentran lo monstruoso en la sexualidad, incesto, etc.
Hay monstruosidad en la vida cotidiana que está camuflada.