Con un auditorio colmado de espectadores, ‘Ensamble Imaybé’ presentó, la noche del 05 de diciembre, el proyecto ‘Eco sonidos’, en la Casa de la Cultura.
Diciembre 07, 2024
Es la noche de un jueves de diciembre. En el auditorio de la Casa de la Cultura, se palpan los nervios, la ansiedad, la espera de un grupo de estudiantes, casi una treintena de ellos que aguardan para hacer su debut; en contraste a la expectación y orgullo que brillan en los ojos de sus maestros, familiares y amigos.
Para muchos de ellos y sus familias, es la primera vez que visitan la Casa de la Cultura, ya que, como mencionaría más tarde Yolanda Aldana, directora de la U.E. Esteban Migliacci, los estudiantes provienen de barrios alejados de la ciudad.
Daniel Vargas Borda, músico y miembro de ‘Ensamble Imaybé’, en esta ocasión maestro de ceremonias, los invita al escenario. Los estudiantes de la Unidad Educativa Esteban Migliacci, ataviados con sus uniformes, desfilan acompañados de instrumentos musicales como zampoñas, flautas y tambores, con la peculiaridad de que estos están elaborados por ellos mismos con materiales de reciclaje.
¿Cómo un grupo de estudiantes puede arrancar melodiosos sonidos a tubos de PVC? o ¿generar profundas percusiones con baldes de simple plástico? Pero así lo hicieron bajo la dirección de sus mentores, Daniel Vargas y Natalia Humacata, fundadores de ‘Ensamble Imaybé’.
Saxofón elaborado con materiales de reciclaje. |
Zampoña elaborada por los estudiantes. |
Miembro de Ensamble Imaybé explicando la elaboración del tambor. |
La música como instrumento para visibilizar realidades
El arte desempeña un papel fundamental en la forma en la que las personas piensan, sienten y se relacionan entre sí, por ello, su influencia sobre la sociedad es más que significativa. Una de las aportaciones más notables del arte es la capacidad que tiene para provocar cambios sociales y políticos.
Así lo afirma Natalia Humacata, directora de ‘Ensamble Imaybé’, “la música, además de ser un instrumento para expresar lo que sentimos, es un instrumento para visibilizar realidades. Los jóvenes, hoy, van a hablar de temas muy reales, muy palpables y que, los adultos pensamos que a ellos no les interesa. Los estudiantes nos van a hablar de problemáticas sociales, de restricciones a la libertad de expresión, de violencias, de cómo ellos, desde sus juventudes, la perciben y qué canciones han elegido para hablar sobre ello”.
‘Eco Sonidos’: cuidado medioambiental y arte en la defensa de los derechos humanos
‘Eco Sonidos’ es una iniciativa de Ensamble Imaybé, que busca potenciar y visibilizar la relación entre arte, conciencia ambiental y derechos humanos para un desarrollo integral, enriquecedor y significativo en sectores prioritarios de la población.
El proyecto propone la reutilización creativa de materiales para la construcción de instrumentos musicales, destacando la importancia de la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental en la producción artística.
Desde el año 2021, Ensamble Imaybé, una organización sin ánimo de lucro, conformada por defensores de los derechos humanos, promueve el cambio social a través del arte y la música como herramientas de libre expresión, mediante la creación y ejecución de proyectos que visibilizan las desigualdades e injusticias.
Daniel Vargas mencionó que “‘Eco Sonidos’ nace por la necesidad. ‘Ensamble Imaybé’ siempre ha trabajado desde el arte, especialmente desde la música, pero era momento de involucrarnos más con el cuidado ambiental, con otros espacios y llegar a un público que necesite este tipo de proyectos. Al ser con materiales reutilizados, no se necesitaban muchos recursos, de esa forma es que nosotros nos motivamos a planificar el proyecto y posteriormente, se lanza la convocatoria concursable de la Unidad de Juventudes de la Gobernación, a la cual aplicamos y la obtuvimos”.
Fue así que a través del “Banco de Proyectos Juveniles” en el marco de la Ley Departamental Nro 472, impulsada por la Unidad de Juventudes, de la secretaría de Desarrollo Humano del Gobierno Autónomo Departamental de Tarija, se desarrolla el proyecto ‘Eco sonidos’.
El proyecto tuvo una duración de tres meses y se enfocó en trabajar con 27 adolescentes de entre 14 y 16 años de edad, de unidades educativas fiscales periurbanas, en este caso la U.E. Esteban Migliacci.
Vargas y Humacata se pusieron en contacto con la directora del establecimiento educativo, Yolanda Aldana, que relata, “me presentaron el proyecto y me pareció magnífico. Me dijeron qué tipo estudiantes requerían, de qué cursos y empezamos a coordinar con la profesora de música para cederles la hora. Luego, ellos mismos [Natalia y Daniel] se dieron cuenta que los estudiantes estaban tan emocionados que querían ensayar todos los días; entonces optaron por ir los fines de semana. Los he visto ensayando en la plazuela los domingos, cerca del colegio. La mayoría de los chicos que ustedes han visto hoy, trabajan. Son estudiantes que vienen de los barrios periféricos, muy alejados del centro de la ciudad, así que para ellos era difícil contar con un tiempo extra”.
Si bien los instrumentos fueron realizados en su mayor parte con material reciclado, el financiamiento, obtenido a través del fondo concursable, permitió la adquisición de parches para los tambores, tubos de PVC, silicona, material de escritorio y refrigerios para los participantes.
“El proyecto no fue simplemente hacer música si no, cambiar vidas. He visto a los chicos crecer junto a ellos [el Ensamble Imaybé] en actitudes. Han cambiado totalmente, han hecho un trabajo casi de familia para construir estos instrumentos. Los he visto unidos trabajando en equipo. ¡Cómo no apoyar esa clase de actividades! Las canciones que han cantado esta noche están llenas de un trasfondo social, de repente, que ellos mismos lo están viviendo” señaló la directora.
El desafío
Acercar proyectos como ‘Eco Sonidos’ a poblaciones prioritarias de nuestra sociedad es un trabajo que demanda no sólo esfuerzo y compromiso, si no también recursos económicos.
Vargas afirma, “lo primero que queremos hacer es buscar financiamiento para poder replicar el proyecto, pero ¿por qué financiamiento? Como dijimos es material reciclado, reutilizado, pero lo que queremos es dar a los jóvenes buenas condiciones para ensayar y crear, llevarles un buen refrigerio, que tengan un espacio lindo donde ensayar, que nosotros podamos dotarles de todo el material; porque, en esta ocasión, ellos han traído sus propios baldes para fabricar el tambor, sus propias cucharas para el saxofón. Entonces, nosotros quisiéramos darles todos los elementos. Eso es lo que soñamos con Natalia. Es un poco utópico por ahora, pero sé que en un futuro lo vamos a lograr”.
Ximena Villca, Maira Benitez, Natalia Humacata y Daniel Vargas, miembros de 'Ensamble Imaybé'. |